El golf y la mente (Cap. 2)

¿Cuánta presión debo hacer en el grip?

No debe ser tan grande como para generar tensión, ni tan leve para perder control del golpe. Debe ser constante a lo largo del golpe y pareja en todos los dedos, incluyendo los pulgares.

En el stance para el putt están involucrados la posición de los pies, la alineación del cuerpo y la posición de la cabeza, todo en relación con la posición de la pelota y la línea en que se desea pegarle. Sin embargo, la manera de hacerlo es aquella que resulte más confortable sin otras reglas, excepto una muy importante que es posicionar los ojos en una línea directamente encima de la pelota o apenas hacia adentro (hacia el jugador).

Nunca se deben posicionar los ojos hacia afuera de la línea entre la pelota y el objetivo

Si los ojos están directamente sobre la pelota, es fácil mirar directamente hacia abajo la línea y determinar adónde se desea dirigir el putt, y así efectuar un buen golpe. Con los ojos apenas hacia adentro aún es posible un buen putt porque se está triangulando, mirando la pelota desde un ángulo que es compatible con un golpe normal, uno que se moverá hacia adentro en el backswing, retornando escuadrado en el impacto y moviéndose hacia adentro de nuevo en el follow-through, exactamente como en un swing completo. El swing completo es un círculo, y el putt es solo una pequeña porción de ese círculo.

Creo también que el ojo izquierdo (si uno es diestro) debe posicionarse detrás o al menos sobre la pelota en relación con el hoyo (si está delante, se pierde la relación visual entre la pelota y el hoyo).

En el golpe hay infinidad de modalidades, pero el que yo prefiero es el golpe tipo péndulo. Nótese que digo “tipo” porque un golpe péndulo puro solo movería los hombros resultando en un golpe difícil de realizar manteniendo una sensación buena y constante. Básicamente, esto roba la sensación, el contacto que trato de incorporar en mi golpe. El golpe empieza con los hombros, pero los brazos y las manos se mueven, más o menos, dependiendo de la longitud del putt y el swing. No es un golpe rígido sino más bien uno en el cual se trata de producir una sensación fluida y rítmica.

En otras palabras, se siente que los hombros inician el movimiento. Pero debido a que las manos y los hombros se hallan relajados más que rígidos, los brazos se balancean levemente independientes de los hombros y las muñecas se articulan un poquito yendo hacia atrás y un poquito viniendo a través. No es una acción de muñecas, es simplemente un movimiento natural. Las manos trabajan juntas durante el golpe. Ninguna de las dos tiene supremacía sobre la otra. El golf se juega con ambas manos, del putt al drive.

El pensamiento es sacar el putter hacia atrás, bajo y despacio, la longitud requerida para el putt, y luego acelerar gradualmente la cabeza del putter a través de la pelota en el golpe hacia adelante. Es importante lograr una aceleración gradual y mantenerla a través de la pelota, lo cual ayuda a mantener ambos, el golpe y la pelota, en la línea. No es un golpe seco. La aceleración no es rápida. La sensación es de suavidad y ritmo en ambos sentidos, lento hacia atrás y gradualmente ganando velocidad hacia adelante. Debido a esta aceleración, el follow-through resultará levemente más largo que el backswing.

Putts cortos

La distancia que rueda la bola luego del putt en el green está determinada solamente por la longitud del backswing. La parsimonia y el ritmo del golpe es siempre el mismo. En un putt corto habrá muy poca, articulación de muñecas. Las muñecas se articulan más en putts largos y las manos se sentirán más activas en el área de impacto. Pero todo es natural, no hay que buscar el efecto, sino dejar que ocurra, la clave es dejar que el putter se balancee tanto en putts cortos como largos.

En putts cortos, la trayectoria debe ser básicamente derecho hacia atrás y adelante, con la hoja del putter escuadrada con la dirección del objetivo. Pero a medida que el putt es más largo, lo correcto es mantener en escuadra la hoja con la tangente del arco que ésta describe al girar los hombros. Es decir, tenderá levemente hacia adentro en el backswing para regresar en escuadra a la pelota en el impacto y nuevamente hacia adentro en el follow-through. Sería un error tratar de mantener la línea del objetivo en un putt largo, se estaría manipulando el golpe con consecuencias negativas.

La Rutina

Todo buen golfista sigue una cierta rutina en cada golpe, y esta rutina es especialmente importante en el putting. Es posiblemente el factor más importante del putting. Cada putt debe ser repetitivo. No importa cuál es la rutina mientras se posea y se siga una cada vez de la misma forma.

Un ejemplo:

Una forma es empezar al reponer la pelota, luego de limpiarla, delante de la marca, poniéndola con la marca y el número hacia atrás, justo dónde se desea hacer contacto. Retroceder y estudiar la línea, luego avanzar y ubicarse al costado de la pelota, poner el putter detrás de ella apuntando a la línea elegida. Recién entonces, posicionar el cuerpo alineándose con la posición elegida para el putter y no al revés. Al posicionar el cuerpo, mirar la línea del objetivo tratando de sentir la velocidad que se le imprimirá a la pelota y la fuerza necesaria para lograrla. Mirar otra vez la pelota focalizándose en el número. Mirar una vez más la línea (recorrerla con la vista, girando la cabeza y visualizando la trayectoria que seguirá la pelota entrando al hoyo – no levantar la cabeza y torcer los ojos). Entonces mirar el número, donde se hará contacto y comenzar el golpe.

Leyendo los Greens

Hasta que le toca a uno el turno de jugar se debe aprovechar el tiempo para, sin molestar al que juega, estudiar la trayectoria de acuerdo a la caída. Se debe evitar retrasar el juego tomándose excesivo tiempo que, además, genera dudas y confusión.

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Leé capítulos anteriores: Introducción aquí ; Cap.1 aquí